EL VELEIDOSO DEDO DEL DESTINO

Eran las 12 de la trade cuando tome mi mochila, y me dirigí al teatro para ver Dulce Caridad.

Tome la combi que me lleva al metro ya en el metro, pues me dispuse a tomar asiento y leer mi libro, que por cierto, no he terminado y no es por flojera sino porque la verdad esta muy bueno y tiene temas muy complicados. Pero regresemos, llegue al Centro cultural Telmex, como a la una de la tarde, y ya estaban ingresando así que saque mi boleto y me dispuse a entrar al teatro.

Lo primero que hice fue ir a ver las placas de las diferentes obras que se han montado en ese sitio, la verdad para un fan del teatro es hermoso ver la diversidad de obras. Después fui por un souvenir, que no compre porque la verdad se me hicieron muy caros, mejor ese pense que podría invertirlo en un boleto para otra obra.

Comenzaron a ingresar a la sala, la verdad ya que estas adentro abres y cierras la boca de la impresión, bueno pues empezarona dar la primera, segunda y tercera llamada.

La orquesta en vivo se escuchaba wow.!!! sin palabras, y después de un preludio tan chido comenzo la obra, y en el escenario Lolita uhhh!!! si hubiera sido posible gritaba.

Se llevo el desarrollo, de la trama que omitire porque quiero que disfruten de esa obra wow!!!,  pero lo chido y divertido es que mientras se desarrollaba me recordaba a mi,jaja, no es tan divertido, pero bueno. La verdad es que de ahí tome la frase que desde hoy en adelante retomo para decir el veleidoso dedo del destino…uh y que si es veleidoso, yo diría que demasiado.

Llego el final de la obra y la verdad yo no quería que terminara, porque la verdad estuvo hermosa. estuve a punto de llorar, si aunque no lo crean iba a llorar y es que el mensaje que yo recibi fue de cachetada con guante blanco, uh esas son las que más duelen, pero bueno ni hablar,

Me fui medio triste a mi casa porque me di cuenta que sólo a veces en esta vida lo principal es esperar y quizá las sorpresas que te llevas buenas o malas te dejaran una experiencia.

No sé que pasará con mi vida amorosa, que es el trauma que  no he podido resolver, porque aún sigo siendo tan controladora, que pretendo alejarme de la gente precisamente para no continuar siendo así, pero no  he de negar que la melancolía me gana y pone triste, pero aprendí que el veleidoso dedo destino no se que me depare para mañana o en toda la semana.

Lo que si se es que lo que tenga que venir le pondremos la mejor cara,

Ya me fui muy lejos cuando lo principal en este post era decir que no se vayan a perder DULCE CARIDAD, es una obra hermosa visual, musicalmente y actoralmente.

Si tienen oportunidad no dejen de ir, no se van arrepentir y se darán cuenta de porque vivimos del veleidoso dedo del destino.