Es un monólogo que intenta explicar las diferencias que ocasiona el ser mujer y hombre, retomadas en el ámbito del matrimonio.
La verdad, es que se queda en eso en una de las tantas explicaciones de este gran dilema de hombres y mujeres, sus comportamientos, sus gustos y la forma de relacionarse.
Lo interesante es que se basa en la comparación de estos entes en la era de las cavernas: El papel de la mujer como recolectora y el hombre como cazador, ambos con diferentes tareas pero su objetivo es la protección mutua.
Hay momentos en que la risa se hace presente por las similitudes que pueden aplicarse a la vida diaria.
Resumiendo, es una puesta en escena que sirve para darnos otra idea de la tan difícil psicología de los hombres y las mujeres, y seguir intentando entendernos como seres humanos (eso si que esta cañón).
Vayan a verla se van a divertir.